No memory. Cities in the world
En un momento de alzhéimer colectivo y de futuro no visible entre el polvo de los desplomes, en un estado de ceguera por shock y de necesidad de absolutos, la exposición No Memory, con sus rotundos dípticos fotográficos y esa intervención con forma de apuntalamiento en la penumbra, nos recuerda, nos insta a volver la cabeza hacia el corazón hacia, de dónde venimos y sobre todo la misma necesidad que tenemos de basarnos en la memoria de lo real compartido, de afianzar lo que hay en común. Con ello, además de una postura se fija y revela también, la infralevedad del palimpsesto del tiempo en la estabilidad del territorio. En No Memory, Suárez lleva todo esto un poco más allá: de modo especialmente sólido en esa parte de la exposición en que ha intervenido el propio espacio del centro de arte mediante puntales de obra que sostienen su techo y nos protegen de un hipotético derrumbe. De nuevo, como en Ciudad Satélite, el asunto de la construcción aparece citado, en un comentario acaso burlón sobre el nuevo uso que ahora puede dársele a tal clase de materiales y utensilios, hace tan sólo unos pocos años pilar (nunca mejor dicho) y señal de la prosperidad económica del país. Abel H. Pozuelo . (Extracto del texto del catálogo de la exposición “No memory: cities in the world” CMAE. Avilés, Enero de 2013) |