Algunos de los espacios sobre los que se extiende Avilés estuvieron antaño poblados por bosques encantados, habitados por duendes , trasgus, xanas… pero el crecimiento urbano los fue haciendo desaparecer y solo el nombre de algunos lugares dan testimonio de su existencia. En la estación de autobuses de Avilés a través de esta intervención artística rescatamos su espíritu y su magia, referentes permanentes de nuestra sociedad contemporánea.
«EL bosque encantado» es una intervención pictórica con una extensión de 70 metros de longitud y 5 metros de altura. En el proyecto se ha considerado los puntos distintos puntos de vista tanto estáticos y dinámicos (vehículos en movimiento) creando una secuencia dinámica que se activa con el movimiento y desplazamiento.
Ubicación: Estación de autobuses de Avilés. Año 2001
Dimensiones: 350 metros cuadrados (70m de longitud x 5m de altura).